F E M E N I N A E L L
A
¿Dónde
está la feminidad? Me pregunto al ver el desmesurado cambio que muchas mujeres
están dando a su imagen. Empiezan por la cabeza y terminan por los pies. No se
salva nada.
Veamos: El cabello suele ser la zona
donde más experimentos hacen “estas mujeres” Las cabezas que se ven,
ya no ondulan al viento los cabellos hermosamente rizados, ni las melenas
lacias. Pocas se ven y sin embargo, lo
que ahora de lleva son las testas “mondas”
y en su defecto, con dibujos geométricos. Las que optan por dejarlo a medio pelo, lo llevan de distintos colores.
Vamos, todo un arco iris en miniatura.
El rostro lo suelen adornar con toda clase de aros. Además de
ponerse más de dos pares en cada oreja,
los labios y aletas de la nariz, son los lugares donde más se ven éstos inusuales
piercing .
Me
pregunto: ¿Estas mujeres no son
besadas? Y si es así, ¿la persona que
anhela tal cosa, le gusta que sus labios se topen con ese pequeño artefacto? A mí no me gustaría.
Hay mujeres que llevan más lejos su
osadía. Incrustan en su lengua un pequeño pendiente y las más “in”, adornan sus pezones con un arete
¡increíble! Pero cierto.
Más abajo, el ombligo tampoco se salva
del consabido aro.
El cuerpo lo suelen usar como si de un
lienzo se tratara. Los tatuajes de la más variada índole ocupan espalda,
brazos, senos, nalgas, piernas etc.
Nombres, anagramas, dibujos florales y
demás fantasías, cubren la piel de estas féminas
Cuándo miran su desnudez en el espejo
¿les gusta lo que ven? ¿No piensan en el tamaño disparate que han hecho? ¿Se
ven mujeres muy femeninas? Y si así
fuera, muy bisojas tienen que estar.
Estoy por asegurar, que ni las mismas
madres que las parieron, reconocerían
esos cuerpos como el de sus hijas, si alguna vez los ven. Cosa que dudo.
Pasemos al tema del vestuario. No tiene
desperdicio alguno.
Los creadores de esos estilos tan
peculiares, deben de estar calvos (algunos), por el esfuerzo tan grande de
someter sus neuronas inventoras a tal energía desplegada.
Todo carece de forma. No hay un canon que
defina o haga entrever, que bajo esa ropa
se esconde un cuerpo de mujer.
Llegamos a los pies. Privados de
sugerentes cualidades, los esconden en zafios y horrendos zapatones, que con
sus excesivas plataformas más que altas, terminan el día agotadas al no poder
moverse con más agilidad.
En resumen, estas mujeres-niñas una vez
pasados esos años adolescentes, dejaran en el rincón más oculto, esas
tropelías hechas a sus cuerpos e imagen.
Pocas, muy pocas se arrepentirán de los excesos
cometidos ya que es, como un reto
lanzado a lo que les rodea y a ellas mismas.
Desde que el mundo es mundo, siempre hemos
estado sometidas a normas y órdenes. Con
muchísimo trabajo, hoy despegamos y abrimos nuestras alas para volar por este
mundo, que también es nuestro. No importa que a veces, nos mostremos fuera de
tono. Lo que realmente importa, es que no dejemos de ser mujeres.
R.P,00/2008/1318
León 16 Mayo 1999
7 comentarios:
Las mujeres de ahora son tan libres, que se visten como ellas quieren
Carla
¡Ay, las modas!
Angelina
Me encanta leer todo lo tuyo
Raquel
Las mujeres siempre han sido grandes emprendedoras y ya cuando son en la edad de mostrar siempre destacan por sus "cosas" un tanto fuera de tono
Federica
Un bonito relato, me gusta cómo retratas a las féminas, es una pura verdad
Pablo P,
Un artículo en el cual, las féminas dejan ver que sus ataduras ya no valen
Carolina
Tenemos que destacar en algo, pero creo que no tanto.
Pepi
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