EL SECRETO ESTA EN LA LLAVE

sábado, 18 de mayo de 2019

UNNA VUELTA POR EL TIEMPO




Resultado de imagen de paisajes





    UNA   VUELTA  POR  EL  TIEMPO



Pasado, presente y futuro. Son tres palabras 

llenas de nostalgia, ilusión e incógnito ¿Quién no 

tiene nostalgia de algo ya pasado? Cuando ese 

antipático y ruidoso reloj que nos marcaba de 

modo implacable el tiempo que nos queda o que 

se nos fue, aquél no existían para nosotros 

porque éramos libres de sus diminutas agujas y 

su monótono ritmo.

Los días se alargaban de forma increíble y había un 

tiempo para todo. Ese pasado lleno de inocencia 

donde sobraba la falsedad y nacía a cada instante la 

amistad verdadera.

Esos zapatos que sólo nos poníamos los domingos. 

La maestra, que con  toda su santa paciencia nos 

enseñaba a sumar y secaba nuestras lágrimas de 

dolor  cuando la sangre brotaba de la rodilla a causa 

de una caída.

La risa fresca y cantarina que nacía pura y su eco no 

tenían fin. Ese primer beso que nos despierta de un 

largo letargo y nos anuncia que ya somos hombres o 

mujeres y entramos en un nuevo capítulo lleno de 

ilusión.

El presente está aquí sin saber por qué puerta se ha 

colado. Cerraremos los ojos un instante para no 

dejar caer esa lágrima, y al abrirlos veremos la 

ilusión del presente.

¡Cómo lo esperábamos! Entró sin anunciarse y con 

él, todos los sinsabores desconocidos para nosotros 

hasta entonces.

Fracasos, engaños, desamores y, una larga lista se 

unen a esa desilusión tan actual que nos hace ser 

personas duras y olvidar con pasmosa facilidad que 

tenemos un corazón grande para amar y lágrimas 

para llorar.


La sonrisa olvidada y en su lugar, muecas llenas de 

desdén y presunción. El tiempo nos ata y controla 

cada momento de nuestras vidas. Nos faltan horas 

en ese reloj que, años pasados  ignorábamos y 

pasábamos de él.

La agresividad y engaño, nos apartan de ese círculo 

mágico que es la sencillez. No valoramos nada. El 

consumismo nos desborda. No sabemos apreciar lo 

que en su día nos llenó de felicidad. Orgullosos y 

vanidosos, nos burlamos de quien intenta darnos su 

experiencia. No recordamos el pasado y con él, lo 

felices que nos sentimos al deletrear y sumar por 

primera vez.

En el presente, ahora mismo, cuando reímos la 

mitad de las veces, éste es un acto tan forzado que 

más parece una mueca. Y es una pena, porque hay 

dentaduras tan bellas que deberían estar a la vista 

con una franca sonrisa el mayor tiempo posible


¿Por qué un beso ahora no nos lleva a un séptimo 

cielo? Sencillamente porque estamos en un presente 

tan falto de romanticismo como de pudor. Se 

despierta tan pronto, que cuando lo hacemos, la 

inocencia y el recato son sinónimos de libertinaje.

¿Qué es el futuro? ¿Existe el futuro? O es, ¿una 

bonita palabra que nos hemos inventado? Cuando 

nos miremos en el espejo mañana, en él veremos 

ese futuro del que siempre se habla como algo muy 

lejano. Está ahí. En nuestros ojos podemos ver la 

nostalgia del pasado. El deseo de mover  las agujas 

del reloj  a una hora cero. Encontrar esos zapatos y 

suspirar por un Domingo radiante y lleno de 

promesas.Oír la voz cansina de la maestra 

explicándonos los cabos, los ríos... Sentir su 

amoroso consuelo en nuestro dolor infantil.

Ese ignorado futuro nos mira hace tiempo. Desde 

que nacemos. Todos lo esperamos sin saber que 

llega con nosotros. Ese desconocido amigo, nos 

acompaña día a día y forja en silencio lo que será 

nuestro paso por la vida.

Cuándo nos referimos a lo venidero, ¿realmente 

somos conscientes de creer que existe? 

Lamentablemente no lo somos y nos aferramos a 

ese tiempo que está por venir ¿Para qué? ¿Para que 

cambie algo que no nos gusta? ¿Desear lo imposible?

Cuando leemos un libro escrito hace muchos años, 

oímos esa música maravillosa compuesta por alguien 

que nos precedió, tal vez en más de un siglo. 

Contemplamos la obra faraónica de una época muy 

lejana ¿No está deleitando nuestros sentidos como

algo que  fue un futuro para esas personas muertas?


Y para nosotros, ¿qué es ahora? Cuando leemos ese 

libro, oímos esa obra musical y vemos esas 

maravillas arquitectónicas, no hay ni pasado, ni 

presente, ni futuro. Todo deja de existir. Es un 

paseo por el tiempo que todos damos sin 

percatarnos de ello. Sólo permanece la nostalgia, 

ilusión e incógnita. Y sin embargo, ¡es tan dulce 

pensar y esperar todo ello!









R.P.00/2008/1318

León Abril 1997








5 comentarios:

Anónimo dijo...

Mis recuerdos son maravillosos


Olvido

Anónimo dijo...

¿Qué es el tiempo? años y años que se van sin poner freno




Raúl

Anónimo dijo...

Es un artículo muy verdadero, todos queremos que pasen los años y, ¿para qué? si supiéramos lo
bien que estábamos



Jane

Anónimo dijo...

Esos años, jamás serán olvidados aunque luego sean malos (algunos)





Pedro

Anónimo dijo...

Cuando iba al cole de pequeña, todos eramos amigos jugábamos y aprendíamos, hoy todo es muy distinto, es una pena



Marisol