EL SECRETO ESTA EN LA LLAVE

sábado, 24 de junio de 2017

EN UN GRAN SUPERMERCADO

 

Resultado de imagen de supermercado


    EN  UN  GRAN  SUPERMERCADO



__A los buenos días, señorita.

__Buenos días señora ¿Le puedo ayudar en algo?

__¡Madre mía, qué tienda! Se parece al granero del 

tío Getulio, por lo grande que es. Dígame señorita 

¿qué tengo que hacer?

__Pues verá, lo primero coger un carrito y luego, 

meter en él lo que vaya a comprar.

__¡Ah, vamos! Como los barrenderos, recoger lo que 

nos interese.

__¡Oiga! Que aquí no hay basura.

__Bueno, no se enfade es un decir mío. La cosa es, 

que yo nunca he estado en un lugar tan grande 

como éste es la primera vez ¿sabe? Y no sé dónde 

están los artículos ¿Me puede ayudar?

__No es norma aquí, pero le voy hacer este favor.

__Aquí tengo una  listilla de lo que necesito. 

Empecemos: Una botella de agua.

__Ahí están, cójala usted.

__¡No, ésa no! Quiero la que anuncian en la tele, ya 

sabe, la que elimina las calorías. Un spray  mata 

cucarachas, ¿sabe usted? Tengo todo un ejército de 

ellas ¡No, ese no! El de la tele, el que las mata bien 

muertas. Dos cajitas de pastillas para dar gusto a las 

comidas ¡No, esas no! Las de la tele. Esas que 

devuelven el sabor de antaño. Un desodorante 

¡Caray! No dude. El que usa en la tele esa señorita 

que no le abandona. Un gel. No acierta ni una ¡eh! 

Deme el que puede usar toda la familia. Una botella 

de coñac ¡Vamos, no sea tan indecisa! El de la 

izquierda. Del que dicen, que es cosa de hombres, 

porque mi marido lo es. Tres pastillas de jabón.

__¿Cuál quiere? –se atrevió a decir la mujer en tono 

titubeante.

__¿Cómo, qué cuál quiero? El de la tele, por 

supuesto. El que usan todas las estrellas. También 

me da, un jabón de esos líquidos para lavar los 

platos. Quiero el del anuncio que con una cucharada, 

tendré para un mes, pues servidora  no ensucio 


tantos platos en un día. Bueno, creo que ya no me 

queda más ¡Ah, sí! Dos paquetes de eso tan íntimo 

que usamos las mujeres. Quiero que me de, el que 

no se mueve, ni se nota, ni traspasa

¡Vamos! El de la regla más fácil. Terminé ya 

señorita. 

Muchas gracias por su ayuda.



Mª Carmen se acercó a una compañera y respirando 

con fuerza le dijo:

_-¡Dios mío! Nunca había oído tantos anuncios de la 

tele juntos en tan poco  tiempo.  No puedo 

comprender, cómo hay todavía mujeres tan simples.

__Tiene que haber de todo sino, cómo íbamos a vivir  
los más listos ¿no te parece?










R.P.intelectual /002008 1318/

 León, Mayo 1995



2 comentarios:

Anónimo dijo...

No me extraña que esa mujer quedara obnubilada al ver tantas cosas



Pilar

Anónimo dijo...

Cuántas personas que hayan en la misma situación hoy en día, de la señora del artículo


Miguel