EL SECRETO ESTA EN LA LLAVE

domingo, 14 de octubre de 2018

CUANDO TODO NOS FALLA



Resultado de imagen de paisajes


            CUANDO TODO NOS FALLA


El otro día, mientras me tomaba un bocadillo, estuve 

leyendo unas estadísticas referentes a los ancianos. 

En un momento dado, un bocado casi se me 

atragantó al leer un dato estremecedor. Decía más o 

menos así: “Las parejas que tienen a su cargo una 

persona anciana, en tiempo de vacaciones buscan 

un hospital para dejarlo allí. Otras, sin escrúpulo 

alguno, lo olvidan en algún lugar más idóneo como 

puede ser una gasolinera”.

La verdad, no es que no lo supiera, pero verlo 

reflejado así fríamente en letras, me quitó las ganas 

de seguir comiendo. Durante un tiempo, me sentí 

anímicamente mal.

¿Cómo es posible que hagan eso? Ellos fueron 

quienes nos concibieron. Entre lágrimas y sonrisas, 

nos trajeron a la vida. Las noches se confundían con l

os días, ante el menor llanto o dolor. Bajo su atenta 

mirada, aprendimos a caminar y a decir las primeras 

palabras. Nos mimaron, nos amaron tal y como 

éramos. Nos dieron sus mejores años...

Y ahora, cuando más nos necesitan, cuando todo les 

falla, nosotros, sus amados hijos, les dejamos en el 

rincón más inhóspito, como si fueran un fardo que 

nos pesa demasiado. ¿Por qué? ¿Aparcarlos lejos de 

nosotros, para que no estorben y nos dejen vivir lo 

mejor posible?

Analicemos y pensemos. La ciencia ha avanzado 

mucho, demasiado en algunas materias, puesto que 

ahora vivimos más años y la cifra de ancianos se 

incrementa más y más.

Se buscan soluciones y el resultado, son las 

residencias para La Tercera Edad. No tengo nada en 

contra de ellas, pero creo que nuestro deber es 

cuidar y atender, siempre que no haya una 

enfermedad grave, a nuestros padres. Darles todo lo 

que ellos nos dieron.

Siento una gran tristeza al pensar, dónde iré a parar 

yo algún día. Espero que sea entre mis hijos y las 

risas de unos guapos nietos. Si no es así, ¿de qué 

me va a servir vivir muchos años? ¿Qué voy a ganar 

con llegar a los cien años o más?


¡Sesudos inventores!, ¿Cuándo darán con el invento 

que libre a los ancianos de la soledad y de la 

tristeza? 

Porque, hacía allí vamos todos ¿no?








R.P. 00/2008/1318

León, 27 Enero 1998

7 comentarios:

Anónimo dijo...

Este artículo es muy bueno para dar a entender que, nosotros seremos mayores, ancianos y nos veremos abandonados por todos



Fedra

Anónimo dijo...

No me canso de leer este bonito y real artículo, haces ver la realidad de las personas mayores



Nuria

Anónimo dijo...

€s un artículo muy real, me da pena leerlo



Maura

Anónimo dijo...

El tener a un familiar mayor y no poder atenderlo por causas ajenas, es la mayor desgracia
para los familiares


Marisol

Anónimo dijo...

Maravilloso el artículo, dice lo cruel que es ser mayor y no tener que te de un beso



Chelo



Anónimo dijo...

Cuando somos mayores aún no nos preocupamos de que será de nosotros unos años más, la vida da muchas vueltas y nosotros los viejos, somos un estorbo para los que nos quisieron



Federico

Anónimo dijo...

¿Qué puedo decir de esta verdad? no tengo 'palabras la pena me embarga viendo la realidad



Tere