PLAYA INGLÉS
Este año me voy de viaje a las Islas Canarias. Descanso, playa y sol.
Salimos de Madrid (Barajas) a las 11 de la mañana. El avión tiene un nombre muy leonés “Las Médulas”, lleno. Pasamos por encima de Segovia Cáceres, Portugal y luego el Océano Atlántico hasta Las Palmas. Esta vez el asiento no está junto a la ventana y no puedo describir las cosas que están bajo la “panza”. Solo veo muchas nubes. Una hora de autobús desde el aeropuerto hasta la ciudad de Gran Canaria. Nos paramos en un restaurante de camino al apartamento y comimos, pues ya era muy tarde. Tenemos alquilado un apartamento muy chulé, en la terraza es donde escribo los apuntes diarios. Después de descansar nos vamos a dar un paseo. Entramos en un hotel muy lujoso y vamos a sentarnos en la terraza del bar. Es muy bonito con pérgolas de flores y una pequeña orquestina tocando.
Nos dimos cuenta que las personas que ocupaban las mesas debían de alojarse allí, pues bajaban de sus habitaciones y todos iban vestidos de “gala”, no como nosotros que íbamos más bien informales. Nos llamó la atención una pareja de hombres muy maduros. Uno de estatura baja, pero muy digno en sus andares, Llevaba entre sus manos una pequeña carpeta que la apretaba junto a su pecho. Los zapatos de ante negro y en la lengüeta un filigrana bordado de colores. El otro, más alto pero algo torpe se valía de un bastón con la cacha plateada.
Este año me voy de viaje a las Islas Canarias. Descanso, playa y sol.
Salimos de Madrid (Barajas) a las 11 de la mañana. El avión tiene un nombre muy leonés “Las Médulas”, lleno. Pasamos por encima de Segovia Cáceres, Portugal y luego el Océano Atlántico hasta Las Palmas. Esta vez el asiento no está junto a la ventana y no puedo describir las cosas que están bajo la “panza”. Solo veo muchas nubes. Una hora de autobús desde el aeropuerto hasta la ciudad de Gran Canaria. Nos paramos en un restaurante de camino al apartamento y comimos, pues ya era muy tarde. Tenemos alquilado un apartamento muy chulé, en la terraza es donde escribo los apuntes diarios. Después de descansar nos vamos a dar un paseo. Entramos en un hotel muy lujoso y vamos a sentarnos en la terraza del bar. Es muy bonito con pérgolas de flores y una pequeña orquestina tocando.
Nos dimos cuenta que las personas que ocupaban las mesas debían de alojarse allí, pues bajaban de sus habitaciones y todos iban vestidos de “gala”, no como nosotros que íbamos más bien informales. Nos llamó la atención una pareja de hombres muy maduros. Uno de estatura baja, pero muy digno en sus andares, Llevaba entre sus manos una pequeña carpeta que la apretaba junto a su pecho. Los zapatos de ante negro y en la lengüeta un filigrana bordado de colores. El otro, más alto pero algo torpe se valía de un bastón con la cacha plateada.
Nos retiramos al apartamento, tomamos una ligera cena, mientras veíamos la tele. Me acosté pronto, pues estaba muy cansada.
Día de playa. Mientras preparo el desayuno, Paco baja al super que está abajo a comprar algo.
Día de playa. Mientras preparo el desayuno, Paco baja al super que está abajo a comprar algo.
Nos vamos a las 10 de la mañana. Una aventura, pues el día anterior, habíamos ido a pasear por un el camino para ojear, por dónde iríamos a la playa ya que para llegar a ella, tendríamos que ir por un espacio lleno de dunas hasta llegar a la inmensa y playa.
Había personas que como nosotros, iban sorteando las grandes y las honduras. Muy cansada pero al fin, el inmenso océano.
Playa de Máspalomas
Playa de Máspalomas
Me acerqué y noté que el agua estaba muy fría. Había mucha gente paseando por la orilla y nadie dentro del agua.
Estuve mucho tiempo, pero lo más me que mojé fueron las piernas. Hacía un viento muy fuerte y más tarde se convirtió en fresco,
Comimos, descansamos, tomamos el sol, la brisa y vuelta a pasar por el camino de las dunas.
Estuve mucho tiempo, pero lo más me que mojé fueron las piernas. Hacía un viento muy fuerte y más tarde se convirtió en fresco,
Comimos, descansamos, tomamos el sol, la brisa y vuelta a pasar por el camino de las dunas.
Cuando llegamos al apartamento, nos fuimos directamente a la piscina, luego subimos a la habitación, nos duchamos y descansamos.
Dunas de Máspalomas

Yo aproveche para escribir los apuntes en la terraza con un concierto de diversos cantos de pájaros y la vista del colorido de hermosas flores y palmeras.
Salimos y nos dimos un largo paseo hacia el centro “Jumbo”, una especie de zoco ya que Marruecos está cerca, “pasando del charco”. Me compré unas cremas de Aloe Vera y Paco me animó a que entrara en la tienda donde había cuatro pequeños estanques en los cuales, había unos 20 o más de diminutos “garra rufa”.
Una diligente muchacha me “regó” los pies, seco y me senté arriba. Introduje ambos pies y los “voraces” peces comenzaron a “limpiar” toda clase de pieles muertas. Sentía un leve cosquillo. Unos quince minutos con los “depredadores”.
Luego nos sentamos en una terraza. Pedí un “Piña colada”, pero tuve que decir que me echaran más zumo de piña, pues estaba muy cargado de ron. Luego vamos a cenar por allí y después al apartamento. Estaba realmente cansada. Dormí hasta que el reloj nos dijo: ¡arriba!
Desayunamos y andando a la playa. Las consabidas dunas que dejan a uno más que cansado.
El aire hizo acto de presencia muy pronto, no era la brisa del otro día y pasado el tiempo se puso algo fresco. Era la fuerza del aire que luego lo atribuimos a la ¿.?
Que comenzó afectando a España y claro, algo les llegó a Canarias.
Regresamos y la vuelta para mí es agotadora, pues ya estoy cansada de andar mucho tiempo por la orilla, luego el calor y las dunas….
La ducha reconfortante, crema en la piel para refrescarla. Luego en la terraza sigo escribiendo las andanzas hasta que salgamos más tarde.
Yo aproveche para escribir los apuntes en la terraza con un concierto de diversos cantos de pájaros y la vista del colorido de hermosas flores y palmeras.
Salimos y nos dimos un largo paseo hacia el centro “Jumbo”, una especie de zoco ya que Marruecos está cerca, “pasando del charco”. Me compré unas cremas de Aloe Vera y Paco me animó a que entrara en la tienda donde había cuatro pequeños estanques en los cuales, había unos 20 o más de diminutos “garra rufa”.
Una diligente muchacha me “regó” los pies, seco y me senté arriba. Introduje ambos pies y los “voraces” peces comenzaron a “limpiar” toda clase de pieles muertas. Sentía un leve cosquillo. Unos quince minutos con los “depredadores”.
Luego nos sentamos en una terraza. Pedí un “Piña colada”, pero tuve que decir que me echaran más zumo de piña, pues estaba muy cargado de ron. Luego vamos a cenar por allí y después al apartamento. Estaba realmente cansada. Dormí hasta que el reloj nos dijo: ¡arriba!
Desayunamos y andando a la playa. Las consabidas dunas que dejan a uno más que cansado.
El aire hizo acto de presencia muy pronto, no era la brisa del otro día y pasado el tiempo se puso algo fresco. Era la fuerza del aire que luego lo atribuimos a la ¿.?
Que comenzó afectando a España y claro, algo les llegó a Canarias.
Regresamos y la vuelta para mí es agotadora, pues ya estoy cansada de andar mucho tiempo por la orilla, luego el calor y las dunas….
La ducha reconfortante, crema en la piel para refrescarla. Luego en la terraza sigo escribiendo las andanzas hasta que salgamos más tarde.
Plza de la Catedral
Fuimos andando hasta el centro comercial y de regreso, compramos una pizza. Cenamos viendo el partido de fútbol, en los penaltis me fui a la cama.
Al día siguiente nos vamos a la ciudad. Recorrimos todo el barrio antiguo, vimos el museo donde hay una réplica del lugar donde dormía Cristóbal Colón las tres carabelas, grabados, el libro donde Cristóbal apuntaba todo el recorrido etc.
Catedral de Sta Ana
En un hermoso patio en una esquina de él, dos papagayos dormían encima de un palo, eran preciosos uno de color azul y el otro
rojo.
Patio casa de Colón Guacamayos
Patio casa de Colón Guacamayos
La casa donde nació Alfredo Krauss. La Catedral, nada de lujos como otras que he visto. Las columnas semejan altas palmeras y las “ramas”, seis brazos en el alto techo. Grande y muy austera. Me gustó.
Pateamos todo lo interesante y nos sentamos en una terraza a comer. Un músico con un acordeón nos deleitó. Me recordó mi hermano, recientemente fallecido, que la dominaba muy bien.
Plza Catedral Sta Ana
Plza Catedral Sta Ana
Quería ver la feria de flores, pero aún no estaba abierta nos dijeron que sería dentro de unos días en honor a las madres.
Faro de Máspalomas
Cogimos un autobús y nos fuimos a ver el faro en la punta de Palma, estaba muy fresco.
Nos llegamos por un camino hecho de tablas encima de la arena, hasta el oasis de Más palomas. Dos patos negros con el pico blanco, nadaban en él, me dijeron que era especie protegida. Regresamos.
Nos llegamos por un camino hecho de tablas encima de la arena, hasta el oasis de Más palomas. Dos patos negros con el pico blanco, nadaban en él, me dijeron que era especie protegida. Regresamos.
Al día siguiente vamos al aeropuerto a coger el vuelo a Tenerife. Media hora, cuando llegamos la niebla comenzó a bajar rápidamente. Cogimos un taxi hasta el hotel, dejamos el equipaje y nos vamos a comer.
Nada más salir comenzó a llover muy fuerte. Nos dejaron en el hotel un paraguas y enfrente nos quedamos a comer. Salimos y seguía lloviendo. Subimos y yo, aprovecho para escribir hasta que salgamos.
Cuando dejó de llover, fuimos al barrio antiguo. Recorrimos sus rincones y lugares muy bonitos. Cenamos y al hotel. Al día siguiente fue muy completo. Con Carmen una amiga de Paco que vive allí, nos llevó en su coche al Teide, cosa que ya descartábamos por no haber desde el hotel una
excursión.El Teide a los lejos
Unos 46 kilómetros más o menos y una carretera en la cual había mas dobles curvas que rectas (estaba muy bien asfaltada y cuidada).
Subir y subir entre enormes pinos a cada lado, luego extensas formaciones de roca y lava que dejaban un paisaje muy desolador, no se veía nada de vida. Llegamos donde está el teleférico. Grandes colas para subir cerca del cono.
Comimos en el Set Service que hay allí y después de mirar y ver la espectaculares formas que el volcán dejó, nos fuimos por la cara norte de la isla, pues el paisaje era más verde y no tan seco por donde subimos.
Basílica de la Patrona La Orotaba y llegamos a la villa de Candelaria. Nos acercamos a la iglesia para ver La Virgen de La Candelaria. Tuvimos la suerte de llegar al final de un acto litúrgico y abrieron las puertas por las que se podía subir hasta donde estaba La Virgen y pasé ante ella.
En la bonita plaza hay nueve grandes estatuas de los guerreros Guanches
Menceyes, de espalda al océano. Fue un día muy completo.
Pelicar Menceye

Menceyes, de espalda al océano. Fue un día muy completo.
Pelicar Menceye
Por la mañana del nuevo día, fuimos al museo de “Naturaleza y el Hombre”. Una verdadera delicia ver cómo ha evolucionado todo. Animales, plantas y los humanos. En el espacio donde están las momias, vimos desde un feto de tres meses, hasta otro de más tiempo, niños y personas adultas.
Cómo hacían de la piel de una cabra, desde sandalias, hasta una pequeña falda etc. Como hacían de la piel de cabra, desde unas sandalias, hasta una pequeña falda etc. Ahora una de las cosas más fascinantes, fue cómo el volcán del Teide explotó dando lugar a la isla de Tenerife. Ríos y ríos de lava se iban al océano que los tragaba sin cesar. No me cansaba de mirar esa fuerza tan colosal que salía sin parar. GRANDIOSO.
Patio de San Cristobal
Patio de San Cristobal
Después nos fuimos a La Laguna en tranvía, una media hora. Me encantó el pueblo de estilo colonial. Todas sus casas de planta baja y un primero están pintadas sus fachadas de bonitos colores y la mayoría de ellas, tienen puertas y ventanas de estilos variados.
Estaban de fiesta, una romería y tanto mujeres como hombres, iban con el traje típico de La Laguna. Muy vistosos.
Estaban de fiesta, una romería y tanto mujeres como hombres, iban con el traje típico de La Laguna. Muy vistosos.
Nos fue a buscar Carmen, la amiga de Paco y nos llegamos donde hay piscinas del océano y terrazas típicas. Disfrutamos tomando un helado y café hasta que volvimos a la ciudad.
Hoy regresamos. Nos lleva Carmen al aeropuerto una vez allí, desayunamos y nos vamos a la sala de espera. Despegamos y esta vez, sí estoy junto a la ventanilla. Después de pasar el océano entro en España, el cielo está muy nublado, grandes nubes muy negras imperan sobre el cielo.
Llegamos a Madrid. Estaba muy nublado y la temperatura era fresca. Al día siguiente, me fui en tren para mi tierra. Ya en el viaje, vi. como la temperatura iba bajando y los cielos muy feos grises. Como ya sabía, aquí la temperatura era muy baja, lo noté mucho a pesar de que en las Canarias y Tenerife, no tenían esas temperaturas por las que se las conoce: “Islas Afortunadas.
Hoy regresamos. Nos lleva Carmen al aeropuerto una vez allí, desayunamos y nos vamos a la sala de espera. Despegamos y esta vez, sí estoy junto a la ventanilla. Después de pasar el océano entro en España, el cielo está muy nublado, grandes nubes muy negras imperan sobre el cielo.
Llegamos a Madrid. Estaba muy nublado y la temperatura era fresca. Al día siguiente, me fui en tren para mi tierra. Ya en el viaje, vi. como la temperatura iba bajando y los cielos muy feos grises. Como ya sabía, aquí la temperatura era muy baja, lo noté mucho a pesar de que en las Canarias y Tenerife, no tenían esas temperaturas por las que se las conoce: “Islas Afortunadas.
León – 8 – Mayo- 2012